Sábado 07 de septiembre de 2024
15 JUL 2024 - 19:49 | Sociedad
Historias

Copa América: el mal momento que vivieron dos vecinos de Santa Teresita en el partido de Argentina

Pamela y Leo estuvieron en el Hard Rock Stadium de Miami para ver la final y sufrieron en carne propia el caos que produjeron las graves falencias organizativas.

Los hinchas de Colombia y Argentina vivieron momentos angustiantes en los instantes previos al partido.

Los incidentes que se vivieron en los alrededores del Hard Rock Stadium de Miami, donde se  disputó la final de la Copa América 2024 entre Argentina y Colombia, fueron la nota negativa del domingo deportivo. Ocurrieron minutos antes del comienzo del partido, mientras miles de personas esperaban afuera para poder acceder al estadio. 

A raíz de esto, la final que terminó coronando a la Selección de Lionel Scaloni comenzó una hora y veinte minutos después del horario programado. Los incidentes en los accesos se produjeron como consecuencia de una avalancha de aficionados sin boleto que entraron al estadio Hard Rock forzando una de las puertas y arrasando a miembros de la seguridad del estadio.

La policía local tuvo que recurrir a la fuerza en múltiples casos ante la avalancha de aficionados que evadieron los controles de ingreso, produciéndose corridas y arrestos. Varios hinchas fueron detenidos, mientras que otros más lograron ingresar Hard Rock Stadium rompiendo los protocolos establecidos de seguridad y acceso.

Esta caótica situación provocó que decenas de aficionados de Argentina y Colombia expresaran enérgicas críticas a la Conmebol, entidad organizadora de la Copa América. Entre ellos estuvieron Pamela y Leo, dos vecinos de Santa Teresita que fueron entrevistados por el diario deportivo Olé a propósito de lo sucedido. 

Un desastre. En mi vida entré a una cancha de esta manera. Horrible, asqueroso. No organizaron nada. La gente ya está de la puerta para acá. Los controles se hacen pasando esa valla. La gente está toda acalorada, se están desmayando. Te empujan, te apretan, o sea, si no pasa nada hoy, va a ser un milagro. No están preparados para organizar nada, de esto no tienen ni idea”, contó Pamela visiblemente alterada. 

Leo coincidió con la desesperante descripción que estaba realizando Pamela: “Es un desastre. Nos cansamos de pedir por favor. Abren una puerta de un metro para que entre toda esta gente: chicos, gente grande… Una locura total. Nos pedían a nosotros que nos corramos para atrás, que hagamos una cola, una cola que no existe”.