El Carnaval del Sol del Dolores fue una sorpresa. No para los que vinieron trabajando duro desde un tiempo, que todos sintieron escaso y apremiante, sino para los que se ubicaron en el novísimo corsódromo para ver pasar las cuatro comparsas que animaron las seis noches. “Pensamos que íbamos a ver el corso de siempre, en otro sitio”, dijo un espectador intentando explicar la diferencia.
El “corso de siempre” se había modificado notoriamente: trajes suntuosos, escuadras que mostraban una cuidadosa coreografía, carrozas de varios metros de altura, música original en vivo y un escenario acorde promovieron un espectáculo que en la noche del sábado 17 –la más fuerte en concurrencia de todas- se acercó a los 20 mil espectadores. Un récord histórico para la ciudad.
Durante los últimos meses del año, en Dolores se estuvo trabajando contra reloj para la nueva propuesta. Una serie de asesores llegados especialmente desde Gualeguaychú estuvieron enseñando técnicas, dando consejos, supervisando tareas para que los equipos que estaban armando las comparsas llegaran –con la lengua afuera, pero llegaran- al momento de la presentación en óptimas condiciones. En esos meses, en Dolores se cosió, se bordó, se ensayaron pasos y danzas. Las carrozas se construyeron de cero, desde los chasis. Las agrupaciones se unieron para realizar compras conjuntas de materiales que iban desde los ejes para la carroza hasta las plumas y los productos para maquillaje artístico.
Mientras tanto, se asfaltó el pasaje Ismael Rossi para convertirlo en un luminoso corsódromo con el agregado de tribunas tubulares y sillas.
BRILLO Y CARTAPESTA
En el galpón que suele utilizarse por la Fiesta de la Guitarra (de frente al corsódromo) se instaló la fábrica de carrozas. Allí se montaron los chasis y sobre ellos se construyeron las figuras que todos vieron pasar: la joven que representaba a la luna de la comparsa Kuyén, la más elevada de todas, asombraba a casi seis metros de altura con su saludo entre reflejos azules.
Se talló telgopor para representar un hombre entre el cielo y el infierno como el de Sambados o el Quinto Elemento de La PetraK. Mientras en un rincón encandilaban las soldadoras, más allá hervía agua con harina y vinagre para hacer el engrudo para la cartapesta.
En el mismo lugar se armaron también módulos más pequeños y las estructuras que llevaban los momos, que en esta nueva versión no fueron los muñecos destinados al fuego sino los personajes que arrastraban una estructura sobre ruedas, de los que el de Ever Ready, personificado por “Valo” Garay, resultó ganador.
@bloqueI@JIMENA BARÓN Y LA PUBLICIDAD
Un golpe de efecto inesperado fue la presencia de Jimena Barón en la apertura del Carnaval del Sol. La actriz y cantante estaba contratada para hacer presencia en el show y, por sorteo, se determinó que desfilara con Kuyén, la comparsa del Club Independiente. Llegó a Dolores con un traje azul y amarillo en medio de la noticia de su separación del tenista Juan Martín del Potro: no hubo medio nacional que no se hiciera eco de que en medio de la ruptura sentimental bailaba en el carnaval de Dolores. Una foto suya en la carnicería de la calle Espora, posando sensual entre los precios del asado, generó miles de reacciones en las redes sociales.
Más allá de la campaña publicitaria que la comuna hizo en medios como el diario La Nación, el efecto “fin de romance” hizo que se conociera que en Dolores había un buen carnaval.
LOS PREMIOS
Este lunes 26, a las 20.00, en Plaza Castelli, se conocerá cuál es la comparsa campeona del Carnaval del Sol 2018. Allí estarán los representantes y las hinchadas de Sheg Yenú, Kuyén, Sambados y La PetraK para recibir también los premios a la Vedette de Apertura, Pasista, Banda y Percusión. ¿Qué tiene en cuenta el jurado a la hora de elegir la ganadora? La música, la batucada, la carroza, el módulo escenográfico, la puesta en escena, la coreografía, la vedette de apertura, la pasista y el vestuario.
Los integrantes del Jurado que votaron estuvo integrado por el bailarín Lucas Picco (coreografía y personaje especial), el músico Gabriel Rodríguez (percusión), el escenógrafo Raúl Albanese y el vestuarista Fernando Tates (vestuario), la artista plástica Claudia Piquet y la pintora Mirta Narosky (carroza) y la couch Marisa Di Ricci (puesta en escena).
Otros reconocimientos fueron entregados el sábado 17: los abanderaros de Sambados, José Echevest y Lucrecia Gómez, y el Lujo Femenino de la misma comparsa, Eva Montenegro. Andrés Marti de Kuyén fue seleccionado como el mejor Picarón, en tanto que Sheg Yenú recibió dos distinciones: los Portaemblemas Adriana Gómez y Mauricio Calabrese y el Rey Momo Osvaldo Garay.