Jueves 01 de mayo de 2025
30 APR 2025 - 16:35 | Sociedad
Historias

Castelli: la odisea que vivió una madre con su hijo positivo de hantavirus

Eugenia Sager contó que su hijo estuvo internado durante 11 días, durante los cuales los médicos no sabían qué era lo que aquejaba al pequeño, ya que el diagnóstico de hantavirus se confirmó días despúes del alta.

Eugenia Sager detalló que su hijo Benjamín “comenzó con un único síntoma: fiebre alta”.

Eugenia Sager, una vecina de la ciudad de Castelli, contó que su hijo fue diagnosticado con hantavirus y si bien Benjamín se está recuperando favorablemente, vivió una angustiante odisea que incluyó 11 días de internación, a raíz de un fuerte cuadro de neumonitis con derrame pleural bilateral y una baja importante de plaquetas, y la incertidumbre de no saber durante ese período qué era lo que aquejaba al pequeño. 

Eugenia realizó un posteo en las redes sociales para relatar su experiencia familiar “porque sentimos la responsabilidad como vecinos y realmente necesario comunicar lo que nos ha sucedido, no para generar miedo sino para concientizar sobre lo que nos ha tocado vivir días atrás”.

En el posteo, la castellense detalló que su hijo Benjamín “comenzó con un único síntoma: fiebre alta, difícil de bajar con antitérmico. Fue diagnosticado el lunes 7 de abril con un estado viral” y agregó que le pidió al pediatra que realizara un análisis de rutina debido a que “en mi interior sabía que algo no andaba bien”

Al ver qué su cuadro empeoraba, el martes 8 le hicieron una placa y presentaba una neumonitis. El día miércoles los análisis sirvieron para confirmar que su cuadro no era algo leve. Terminamos en la Clínica del Niño, donde transitó 11 días de internación, con una incertidumbre terrible por no saber su diagnóstico”, afirmó Sager. 

En concreto, el niño tuvo un cuadro de neumonitis con derrame pleural bilateral, plaquetopenia (baja muy fuerte de plaquetas) y necesitó provisión de oxígeno. “Gracias a Dios y a los médicos, Benja respondió bien a los antibióticos y el sábado 19 le dieron el alta. Ahora está con muchos cuidados, pero ya recuperandose”, agregó.

Días después del alta médica, la familia recibió la noticia de que Benjamín había tenido hantavirus. “Luego de pensar y pensar la forma del contagio exacto, la realidad es que no la sabemos. Pero lo que sí sabemos es que el día sábado 5 a la mañana (un día después de presentar síntomas), nuestra gata trajo a casa tres ratones de cola larga muertos. Es decir que esos roedores se encuentran en nuestro barrio…”, consideró Sager. 

Superada la angustiante experiencia, la castellense alertó a la comunidad por la presencia de roedores, que son una de las formas de tranmsión del hantavirus: “Por favor pedimos a todos los vecinos que limpien sus terrenos, que ante la sospecha de roedores pongan veneno. Gracias a Dios pudimos contar el final feliz, pero nadie tiene que pasar por lo mismo”, concluyó.

Medidas de prevención del hantavirus
>Evitar la convivencia con roedores y el contacto con sus secreciones.
>Evitar que los roedores entren o hagan nidos en las viviendas.
>Tapar orificios en puertas, paredes y cañerías.
>Realizar la limpieza (pisos, paredes, puertas, mesas, cajones y alacenas) con una parte de hipoclorito de sodio y nueve de agua (dejar 30 minutos y luego enjuagar). Humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.
>Ubicar huertas y leña (a 30 cm de altura) a más de 30 metros de las viviendas, cortar pastos y malezas hasta un radio de 30 metros alrededor del domicilio.
>Ventilar por lo menos 30 minutos antes de entrar a lugares como viviendas y galpones ubicados en ambientes rurales y/o silvestres en zonas endémicas que hayan estado cerrados por periodos prolongados. Cubrirse la boca y la nariz con un respirador o máscara N95 antes de ingresar.
>Tener especial cuidado en la puesta en marcha de ventiladores y de aparatos de aire acondicionado cuyos filtros o conductos puedan haber tenido contacto con polvo contaminado, roedores o excretas de estos. De tener que realizarlo, realizar la limpieza adecuada previamente y cubrirse con un respirador o máscara N95.
>Al acampar hacerlo alejado de maleza y basurales. No dormir directamente sobre el suelo; consumir agua potable.
>Si se encuentra un roedor vivo: usar trampas para capturarlo (no intentar tocarlo o golpearlo).
>Si se encuentra un roedor muerto: rociarlo con hipoclorito de sodio junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos. Luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 cm de profundidad o quemarlo.
>El control de roedores no es practicable en el medio silvestre por el impacto ecológico, sin embargo, debe aplicarse en áreas urbanas.
>Consultar en el municipio por el control integral de plagas.