Jueves 19 de septiembre de 2024
09 AUG 2024 - 10:39 | Sociedad
Policiales

Dos detenidos de Dolores en el operativo que desactivó una organización dedicada a la caza ilegal

La operación “Cazador Cazado” llevó a que, por primera vez en la historia judicial argentina, se realizaran detenciones por caza ilegal de animales en peligro de extinción.

A Noya y Funes los detuvieron por caza ilegal de animales en peligro de extinción y tenencia ilícita de armas.

El operativo “Cazador Cazado”, llevado a cabo el lunes pasado por la Policía Federal Argentina (PFA), que permitió desmantelar una organización criminal dedicada a la caza y comercialización ilegal de especies protegidas dejó como saldo dos detenidos deDolores. Se trata de Jorge Néstor Noya y Guillermo Funes, propietario y encargado, respectivamente, del coto de caza ubicado en los Montes del Tordillo

Fue en una finca de esa zona del partido de Dolores donde la Policía Federal Argentina encontró patas y orejas de elefantes, cueros de yaguaretés, astas de ciervos y antílopes, entre otras. Según se indicó, se secuestraron en total casi 500 productos y subproductos de especies silvestres, así como armas y municiones.

Se trata de una causa judicial que se inició en 2018 y que se había archivado a raíz de la pandemia, según publicó La Nación. Ahora se reactivó y tras 14 allanamientos en diferentes cotos de caza no autorizados, domicilios, depósitos y oficinas de Santiago del Estero, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires, detuvieron a un total de 4 hombres: además de Noya y Funes, los otros son Federico Manuel Testa y Marcelo Alejandro Araujo. En tanto, otros 3 permanecen prófugos: Leonardo Martín Destefani Villafañe, Federico Gustavo Oliva y Carlos Pablo Escontrela.  

Los 4 detenidos fueron indagados y se les imputó como coautores del delito de depredación de fauna silvestre, agravado por haberse cometido de modo organizado, con el concurso de más de tres personas, y con armas y medios prohibidos, así como de la provisión ilegal de armas de fuego, agravado por resultar una actividad habitual.

La investigación fue liderada por la Fiscalía Federal Nº 1 de Lomas de Zamora a cargo de Sergio Mola. Según informó La Nación, por primera vez en la historia judicial argentina se realizaron detenciones por caza ilegal de animales, provisión de armas sin autorización a los clientes extranjeros de los cotos de caza y exportación de trofeos con certificados falsos. 

La web de La Nación señala que el principal referente es Jorge Noya, propietario, director y fundador de Caza y Safari Argentina. En su página web, en su cuenta de Instagram, en el foro denominado “African Hunting” y en la web Online Hunting, ofrece el servicio de caza de fauna silvestre en distintas zonas y provincias para personas provenientes del exterior (el sitio de la organización se presenta en inglés).

El Ministerio de Seguridad de la Nación precisó que en el operativo se incautaron más de 200 pieles de animales asesinados y protegidos por Ley, como búfalos de agua, ciervos y pecaríes, 20 mil piezas de taxidermias, astas y cuernos de diferentes especies. También se recuperaron más de 30 búfalos de agua, ciervos del pantano y ñandúes, que se hallaban dentro de un campo utilizado para la caza ilegal.

La red desarticulada captaba cazadores en Europa y Norteamérica a través de una página web que promocionaba "tours de caza" a cifras siderales en moneda extranjera, evadiendo controles fiscales. Los detectives del departamento Delitos Ambientales de la Policía Federal, luego de meses de investigación a través de seguimientos, análisis de redes sociales y escuchas telefónicas, lograron identificar a los involucrados. Además secuestraron vehículos de alta gama, más de 30 armas largas y cortas utilizadas para la matanza de especies, dispositivos electrónicos y documentación incriminatoria. El valor de los bienes secuestrados y los elementos relacionados a la caza furtiva supera el valor de los 50 millones de dólares.