Jueves 21 de noviembre de 2024
25 AUG 2023 - 16:10 | Sociedad
>Si sos víctima de violencia familiar o sexual, llamá a la Línea 137

Tandil: Raúl Pérez Roldán sumó una nueva denuncia por abuso sexual de una menor

La ex tenista Gabriela González Saavedra, quien fue doblista de Gabriela Sabatini, realizó una presentación judicial por lesiones y abuso sexual agravado y relató su durísima experiencia en TV.

“Con la serie (de Star+) exploté. Cuando lo veo de la misma manera, con la misma soberbia, empecé con un ataque de pánico que no podía respirar”, contó González Saavedra.

El ex entrenador de tenis Raúl Pérez Roldán volvió a ser denunciado ante la Justicia, como ya lo habían hecho su hijo, Guillermo Pérez Roldán, y Graciela Pérez. Este jueves se conoció que la ex tenista Gabriela González Saavedra, quien fue doblista de Gabriela Sabatini, lo acusó por abuso sexual cuando era menor de edad.

El diario El Eco de Tandil informó que González Saavedra hizo la denuncia "ante el fiscal federal Santiago Eyherabide, en una presentación hecha en la sede judicial de Azul", en la que contó que sufrió lesiones y abuso sexual agravado, entre otros delitos, mientras era entrenada por Pérez Roldán entre sus 11 y 16 años. Además, expuso que los hechos ocurrieron en Tandil y en "varios lugares a donde viajaban juntos a disputar torneos".

La mujer, que actualmente tiene 54 años, se dirigió a la misma dependencia federal donde se investiga al ex entrenador por lesiones graves, violación, lavado de activos y reducción a la servidumbre, delitos ocurridos en las décadas del ‘70 y ‘80 y expuestos por su hijo Guillermo en una nota con el periodista Sebastián Torok, de La Nación, que se convirtió en la piedra fundamental de la denuncia y de la investigación.

En una entrevista concedida al programa de televisión “El Diario de Mariana” (América) contó por primera vez los abusos que sufrió en su niñez y pleno desarrollo en el deporte. “Esto no lo supieron ni mi mamá ni mi papá. No lo sabe mi familia. Fue algo que traté de guardar en algún lugar, siempre estuvo ahí dando vueltas, pero no lo quería visualizar”, contó conmocionada. 

 

En su emotivo relato, coincidió con la metodología que reveló Guillermo Pérez Roldán. “Ganamos el Mundialito con Gabriela (Sabatini) en el dobles y después de que salí de jugar el single, me miró y me dijo ‘Jugaste inmundo’, ‘Pero gané’, ‘Nena, no entendes nada de la vida’. De la nada. Ese día me dice eso, le respondí ‘bueno, jugué lo mejor que pude’ y me dice ‘Vení, vení’´, fuimos para un costado en el club Altamira de Venezuela y me dio tal trompazo que me caí. ‘A mí no me contestas así’, me dijo”, señaló.

Si bien González Saavedra destacó que no hubo “no hubo acceso carnal”, relató gravísimos episodios de violencia y abuso sexual. “Hasta los 13 eran insultos y golpes. Pero cuando estábamos en algunos viajes, ya siendo un poquito más grande, 13 años, me decía que yo era una putita. ‘A vos te gusta que vengan los pibes y te vean las tetas’, decía”, evocó.

También contó que una vez el ex entrenador del club Independiente de Tandil “vino a la habitación del hotel, le dijo a Gabriela (Sabatini) que saliera y me pegó patadas, patadas en la cola que la tuve morada durante varios días. Me estiró la remera para abajo, me agarró mis pechos, de los pezones, y los empezó a apretar con tanta fuerza que ya no los sentía. Y me decía, ‘¿Sabés por qué te quieren dar el contrato? Porque sos una putita, las putitas hacen esto, muestran las tetas’. Me mordió los pezones y me decía ‘Eso hacen los hombres’”.

En otra ocasión, luego de que González Saavedra ganara un torneo en Italia con 14 años, recibió una caja de bombones por parte del dueño de Volvo. A la noche, Raúl Pérez Roldán le sacó los bombones y le dijo: “‘Vaca, dejá de comer’. Me tira en la cama, se baja el pantalón y me dice ‘Esto es lo que colgamos los hombres de verdad. Vos no entendés que te trae esa cajita de bombones para que le chupes esta’. Yo no estaba preparada, yo viajaba con mis muñecas. Ahí sí grito, me enojo y lo empujo. Me empuja con tanta fuerza que me da el cráneo con la punta de la cama y vi que tenía sangre”.