Fernández le pidió a los intendentes contener el precio de la canasta
El presidente electo le encomendó a los jefes comunales que sean los garantes de la aplicación del plan contra el hambre, la medida que lanzará en los primeros días de su gobierno. Juan Pablo de Jesús es uno de los partícipes activos de la iniciativa.
Alberto Fernández habló de este tema con un conjunto de jefes comunales de la provincia de Buenos Aires para que coordinen el trabajo con Daniel Arroyo, quien se encamina a asumir como ministro de Desarrollo Social. Les dijo, además, que necesita que se concentren en controlar la evolución de los precios de los productos de la canasta básica, uno de los puntales del programa.
El grupo de intendentes más cercanos a Fernández, que integran Gabriel Katopodis (San Martín), Juan Zabaleta (Hurlingham), Juan Pablo de Jesús (La Costa), Alberto Descalzo (Ituzaingó) y Julio Zamora (Tigre), estuvo la semana pasada en el Congreso para reunirse con Carlos Caserio, el jefe del bloque de senadores del PJ.
El plan tiene una pata legislativa importante: incluye el impulso de una ley de góndolas, con el objetivo de asegurar la competencia entre las diferentes marcas en los supermercados. La iniciativa impide que los supermercados destinen una góndola completa a una sola marca y obliga a las cadenas a exhibir productos de elaboración nacional.
Si ley de góndolas no se debate antes del 10 de diciembre, la iniciativa será parte de un paquete de leyes que Sergio Massa, futuro presidente de la Cámara baja, prepara para los primeros 120 días de gobierno. El Frente de Todos tendrá mayoría propia en el Senado. En Diputados, en cambio, deberá apelar a negociaciones con el peronismo no kirchnerista.
"La idea es que los intendentes cuiden en el territorio todas las medidas del plan contra el hambre. Ellos son los que están en contacto con las PyMEs que producen los alimentos, con los distribuidores y con los mercados de sus municipios", dijo a La Nación uno de los participantes de la reunión con Caserio. "Son los que tienen las herramientas necesarias para garantizar que esto llegue de verdad a la gente", agregó.
Ese grupo de intendentes se comprometió a listar todos los programas municipales en funcionamiento para contener el precio de los alimentos. En esa nómina figuran programas adoptados en San Antonio de Areco y en Hurlingham, donde rige una "canasta popular", acordada con los comerciantes locales. También se proponen sistematizar todas las ferias y mercados populares que se organizan desde los gobiernos municipales.
La idea es tener todo listo antes del 10 de diciembre. En simultáneo, Arroyo retomará en los próximos días las reuniones sectoriales para formar el consejo que aplicará el plan. Esta semana tiene previsto encuentros con universidades que investigan temas alimentarios y que producen alimentos.