Viernes 18 de octubre de 2024
06 JUN 2024 - 11:10 | Culturas
Efemérides

Día de la Ingeniería argentina: por qué se celebra hoy 6 de junio

Se instauró en 1895 para conmemorar el 25º aniversario de la graduación del primer ingeniero civil graduado en el país.

Además de sus aportes a la ingeniería, Luis Augusto Huergo fue diputado y senador por la provincia de Buenos Aires.

Junio es un mes especial para el mundo de la ingeniería en Argentina dado que en ese mes pasaron dos de los mayores hitos vinculados con esta profesión: se incorporó esta carrera a la Universidad de Buenos Aires (UBA) y 5 años más tarde, se recibió el primer ingeniero.

Por ello, se genera un doble festejo: el Día de la Ingeniería Argentina y el Día del Ingeniero. Mientras que la primera de estas jornadas se celebra cada 6 de junio en honor al primer profesional de esta carrera, Luis Augusto Huergo, la segunda se conmemora cada 16 y recuerda el día en que se firmó, por iniciativa de Carlos Enrique Pellegrini -padre del presidente Carlos Pellegrini-, la resolución por la que se incorporó Ingeniería a la currícula de la UBA en el año 1855.

El Día de la Ingeniería argentina se celebra el 6 de junio en homenaje a Luis Augusto Huergo, el primer ingeniero civil graduado en el país quien se recibió un día como este pero de 1870. Se trata de una jornada histórica que se instauró en 1895 gracias al trabajo del Centro Argentino de Ingenieros (CAI), que propuso conmemorar el 25º aniversario de la graduación de Huergo.

Además de sus aportes a la ingeniería y a la política (fue diputado y senador por la provincia de Buenos Aires), Luis Augusto Huergo pasó a la historia al ser el primer presidente de la Sociedad Científica Argentina, institución que se fundó en 1872 con el fin de coordinar e impulsar el desarrollo de la ciencia en el país.

Sin embargo, Huergo se destacó ante todo por los trabajos y las obras que realizó en tanto ingeniero. Una de las más importantes de sus primeros años como profesional es la del denominado Camino Blanco a Ensenada. En 1876, con menos de 40 años de edad, fue designado director de las Obras del Riachuelo, las cuales dieron como resultado la construcción de un puerto de barcos de gran calado.

Huergo dedicó gran parte de su vida a la idea de navegación, tanto marítima como fluvial. En este aspecto, resultan fundamentales los aportes que hizo para que sean posibles los viajes por los ríos a lo largo y a lo ancho de todo el país.

Algunas de las obras que se vinculan a esto son la canalización de los ríos Tercero, Cuarto y Quinto. Al mismo tiempo, Huergo fue el responsable de los estudios que permitieron encauzar el río Bermejo y diseñó un canal que hace posible la navegación de la provincia de Córdoba al río Paraná.