La Costa: luego de dos décadas, Sebastián “Negro” Ojeda se retiró del arbitraje
El sanclementino dirigió partidos de fútbol desde principios del año 2000. A los 48 años decidió colgar el silbato y guardar las tarjetas amarilla y roja para disfrutar los fines de semana junto a su familia.
En la 13ª y última fecha del Torneo Clausura 2024 de la 1ª división masculina de la Liga de Fútbol de La Costa se retiró el árbitro Sebastián Ojeda, conocido en el ambiente futbolístico como “El Negro Ojeda”. Fue en la cancha de Villa Clelia, donde el local Defensores superó por 4 a 1 a All Boys de Mar de Ajó.
Ojeda comenzó su trayectoria a principios del año 2000 y tras más de dos décadas de arbitraje decidió que era momento de colgar el silbato y las tarjetas roja y amarilla y disfrutar de los fines de semana con su mujer Verónica, sus cuatro hijos (Morena, Esteban, Brian, Agustín) y sus dos nietos (Ciro y Roma).
“Le dediqué más de 20 años, todos los fines de semana, a esta hermosa profesión. El arbitraje me dio muchas alegrías, satisfacciones, amigos que todavía conservo a lo largo de tantos años, pero también me quitó cumpleaños, Día de la Madre, Día del Padre, fechas que uno estaba todo el día en la cancha y lejos de la familia”, afirmó Ojeda.
Antes del choque entre Defensores de Villa Clelia y All Boys, todos los jugadores se pararon en el centro del terreno de juego y Ojeda recibió una placa homenaje por su trayectoria de parte del club local del barrio de Mar de Ajó y otra del Cosme Argerich.
En su último partido lo secundaron Adrián Freire, como asistente 1, y Ariel Bandi, como asistente 2. Y en la cancha estuvieron presentes tres de sus grandes amigos: Darío Eberle, Javier Sosa y Ernesto “Cepillo” Díaz.
En más de 20 años, Ojeda fue árbitro del fútbol local pero también trascendió las fronteras del Partido de La Costa, ya que impartió justicia en partidos del Federal, Regional, Argentino B y Copa Argentina.
“A los 48 años siento que es momento de dejar a los más jóvenes, hay una buena camada de árbitros que surgieron en los últimos años y puedo retirarme tranquilo que las canchas estarán bien dirigidas por estos chicos. Soy un agradecido a la vida por todo lo que me brindó el arbitraje”, finalizó emocionado Ojeda, quien regaló en este último partido su indumentaria a los otros árbitros, tarjetas a los jugadores y hasta el personal policial que lo secundó en su retiro.