Sábado 07 de septiembre de 2024
23 JUL 2024 - 17:53 | Sociedad
Religión

La Región: oficializaron la designación de un sacerdote exorcista para la Diócesis de Chascomús

Se trata del Presbítero Miguel Ángel Tamagno quien fue nombrado por el Obispo para desempeñar ese rol.

Miguel Ángel Tamagno fue designado como sacerdote exorcista de la Región.

Monseñor Juan Ignacio Liébana designó al Presbítero Miguel Ángel Tamagno como párroco exorcista la Diócesis de Chascomús. El nombramiento fue comunicado a través de las redes sociales donde se compartió el documento oficial emitido por la sede eclesiástica.

La Diócesis que tiene sede en la ciudad de Chascomús comprende a dicho distrito y a los partidos de Coronel Brandsen, Lezama, Castelli, Dolores, General Belgrano, General Guido, General Lavalle, General Paz, Maipú, Monte, Pila, Tordillo y La Costa.

Liébana apuntó que Tamagno, se ha ido preparando y formando para este ministeriode consolación en nuestra diócesis y seguirá interiorizándose en este tema”.

El diocesano acompañó ese nombramiento con una carta pastoral acerca del “ministerio de la consolación”, que, según explica, “tiene por fin ayudarnos a vivir mejor nuestra espiritualidad cristiana”.

“Al ser bautizados, uno de los primeros ritos que celebramos es el llamado ‘exorcismo’, que consiste en una unción con el aceite de los catecúmenos en nuestro pecho, acompañada de una oración en que se le pide a Dios que nos proteja en la lucha contra el mal. Ya desde pequeños, al iniciarnos en nuestra fe, se nos está diciendo que tendremos que ‘poner el pecho’ ante las dificultades de la vida, porque la vida es ardua. Pero no lo haremos con nuestra propia fuerza, sino confiados en el poder de la unción que Dios realiza en nosotros", se señala en el documento.

El Obispo explica que hay dos modos de obrar en el mundo demoníaco: la acción ordinaria y la acción extraordinaria. “La acción ordinaria es la tentación. Es la más perjudicial, porque se opone a la voluntad divina, nos va dañando y envenenando de manera casi imperceptible, nos enferma espiritualmente y nos va alejando del amor de Dios, a través del odio, la soberbia, el aislamiento, la idolatría del dinero y del tener, la crítica, la indiferencia, el individualismo, la violencia, las divisiones, la tristeza, la envidia y los vicios, buscando destruir nuestra vida”, detalló.

Monseñor Liébana aprovecha la oportunidad para “animar a todos los fieles a confiar en los medios tradicionales de nuestra fe para combatir las asechanzas del diablo, acudiendo a golpear la puerta correcta y no las equivocadas”.

“Debemos confiar en las personas que se han preparado para ello y han sido consagradas, para consolarnos y acompañarnos con los medios tradicionales que Jesucristo ha confiado a la Iglesia desde sus orígenes”, aconsejó.

Por eso, anima también encarecidamente a los sacerdotes y diáconos a ejercer el consuelo espiritual a través de la escucha, la bendición de las casas, el acompañamiento espiritual, la adoración al Santísimo, el acompañamiento de la religiosidad popular, la catequesis, la escucha atenta, los sacramentos, la atención a los pobres y las misiones populares, entre otras iniciativas.

“Debemos tomar conciencia, como Iglesia, de la importancia de ser la ‘puerta correcta’ que acompañe y no la puerta que se cierra, generando que muchos busquen otras puertas", exhortó.