Mar Chiquita: condenaron a prisión perpetua al femicida de Nicole Peña
El acusado recibió la máxima pena. Había asesinado a su ex pareja en diciembre de 2021 y tirado su cuerpo en un aljibe.
El Tribunal Oral en lo Criminal Nº 4 condenó a prisión perpetua a Juan Domingo Marquestau, acusado del femicidio de su ex pareja, Nicole Peña, ocurrido en diciembre de 2021 en un campo de General Pirán, partido de Mar Chiquita.
Los jueces Gustavo Fissore, Alfredo Deleonardis y Leonardo Celsi lo hallaran culpable por el delito de homicidio triplemente agravado por el vínculo, por mediar violencia de género y por alevosía.
Familiares y amigos de Nicole Peña se acercaron a Tribunales para escuchar la sentencia, para escuchar a los jueces decir “prisión perpetua” al femicida. También estuvieron presentes agrupaciones sociales y referentes en la lucha contra la violencia de género, como Marta Montero, la madre de Lucía Pérez.
De esa manera, los jueces respaldaron la acusación sostenida por el fiscal del caso, Ramiro Anchou, quien sostuvo que Marquestau entre las 19 del jueves 23 y la madrugada del viernes 24 de diciembre de 2021 recibió en el campo del que era casero a su expareja, y que una vez allí la golpeó con sus manos, le ató los pies y la ahorcó con una cuerda hasta dejarla inconsciente para después arrojarla a un aljibe donde finalmente murió a causa de asfixia por sumersión, informó el sitio Qué Digital.
A su vez, los jueces descartaron la postura de la defensa oficial, a cargo de Mauro Giacomaso, que buscaba que se declarara la invalidez de la detención del acusado y por consiguiente todo el proceso al cuestionar la legalidad del operativo montado en el campo de General Pirán que derivó en su aprehensión y en el hallazgo del cuerpo de la víctima.
“No aguanto más, me mandé la cagada, no puedo dormir”, le dijo Marquestau a los policías cuando ingresaron al campo, de acuerdo a un acta que fue leída en el inicio del debate por pedido del defensor, a lo que sumó: “Me provocó y me harté, la ahorqué y la tiré al aljibe. Yo la amaba y me saqué las ganas”, detalló el mencionado sitio web de noticias.
Fue tras esas palabras y al encontrar el cuerpo de Nicole Peña en el aljibe que Marquestau quedó detenido, condición en la que permanece desde entonces.
El defensor buscó que se dictara la invalidez de todo el procedimiento al afirmar que había existido coacción policial para que Marquestau confesara el crimen. Para eso sostuvo que eso ocurrió en la noche del 24 de diciembre cuando el por entonces jefe policial Marcelo Larroca viajó desde Mar del Plata hasta el campo de Pirán después de que durante el día se realizara un rastrillaje y en la previa de uno nuevo previsto para el 25 de diciembre.
Sin embargo, en su voto el juez Fissore consideró válido el procedimiento policial y concluyó que no existió afectación de las garantías constitucionales del acusado, como planteó el defensor. Para eso, incluso, usó como argumento la propia declaración del acusado en
Incluso, los jueces respaldaron la postura del fiscal que planteó que más allá de la confesión el hallazgo del cuerpo sería “inevitable e inmediato” en el nuevo rastrillaje con mayor personal que se había programado para el 25 de diciembre.
La lectura de la sentencia fue escuchada en medio de conmoción y llanto por familiares de Nicole Peña, fundamentalmente cuando se repasó la crueldad del crimen: tras los golpes y el ataque, la víctima permanecía con vida al momento de ser arrojada al aljibe donde finalmente se produjo su muerte tras haber sufrido un “gran sufrimiento”, según detallaron los peritos.
En la sentencia, los jueces repasaron en base al testimonio de familiares y allegados diversos antecedentes de maltrato y violencia de género sufridos por la víctima por parte de Marquestau. Y concluyeron estar ante una “historia típica de violencia de género” con base en el miedo que la víctima, una mujer vulnerable, sufría a partir de la conducta desplegada por Marquestau.