El Capitán de la "Expedición Atlantis" presentó su libro sobre la odisea
El dolorense Alfredo Barragán brindó una charla magistral en la que narró detalles inéditos sobre la expedición concretada entre mayo y julio de 1984.
“Expedición Atlantis” es el proyecto pergeñado a principios de 1980 por el abogado bonaerense Alfredo Barragán, para corroborar la teoría de que los africanos podrían haber llegado voluntaria e involuntariamente a América 35 siglos antes que Cristóbal Colón.
Su elucubración no carecía de fundamentos: por un lado, había conocido en México las colosales “cabezas olmecas”, unas esculturas gigantes de tres metros que representaban a hombres de raza negra; por el otro, luego de años de estudio de las corrientes marinas y de la dirección de los vientos, encontró una cinta transportadora que va hacia América.
En ese contexto, surgió la idea de construir una balsa de troncos, sin motor ni timón, similar a las existentes en África hace 35 siglos atrás.
“El alma de Atlantis fue la pureza. Nosotros éramos unos románticos, y el romántico no mide esfuerzos, ni dinero ni tiempo”, cuenta hoy Alfredo Barragán, que el viernes 24 estuvo en el Colegio de Abogados de La Plata presentando el libro “Expedición Atlantis”.
Con gran marco de público presente y con entrada libre y gratuita, la charla, que estuvo organizada por la revista Andar Extremo y apoyada por la subsecretaría de Deportes de la Provincia, comenzó pasadas las 18 y se extendió por un lapso de dos horas.
Barragán, que estudió abogacía en La Plata y siguió con el estudio jurídico de su abuelo y de su padre en Dolores, es un apasionado por el buceo, el montañismo, la lectura y la navegación.
El 22 de mayo de 1984, la balsa “Atlantis” partió del puerto de Tenerife, en las Islas Canarias, y llegó 52 días más tarde al puerto La Guaira en Venezuela. Merced a esta proeza científica, cultural y deportiva, Alfredo Barragán, Jorge Manuel Iriberri, Horacio Oscar Giaccaglia, Félix Arrieta y Daniel Sánchez Magariño, los cinco tripulantes, corroboraron la teoría de la inmigración precolombina.
En la charla de la semana pasada, “El Petiso” o “El Capitán”, como lo llaman a este expedicionario que pesa 64 kilos y mide 1,63 metros de altura, recalcó que vive de acuerdo a lo que cree. Y enfatizó: “Soy un vasco cabezón que no abandona jamás aquello de lo que me he enamorado. Yo no puedo leer este libro sin llorar. Lo mismo les pasa a mis compañeros, porque está contado desde arriba de la balsa”.
La edición del libro es otra obra sublime. Según informó la agencia de noticias Info Blanco Sobre Negro, contiene 250 fotografías, seleccionadas de un total de 6.500 que fueron capturadas durante la expedición. Las tapas son duras y tienen un relieve similar al del lienzo de la vela de la balsa, que otrora perteneció a la Fragata Libertad.
Además, contiene delicadas infografías, una copia de la película en alta definición y un símil de la carta que le envió el noruego Thor Heyerdahl, autor del libro Kon Tiki, luego de finalizada la expedición.
A poco de cumplir 70 años, Barragán, que aclara que no tiene casa y que no hay nada material que lo seduzca, expresa sus deseos más mediatos: “Vivo feliz y en plenitud. Soy un romántico. Quiero seguir haciendo más de lo mismo”.