Los que remarcaron son los dueños del mercado
Molinos Río, Cañuelas, Mastellone y AGD, algunos de los que subieron precios sin justificación y los volvieron atrás, venden, en promedio, 5 de cada 10 productos en góndola.
La secretaría de Comercio Interior mantuvo reuniones con grandes supermercados y fabricantes de alimentos con el fin de acordar la vuelta atrás de remarcaciones de precios preventivas, que se dieron en la semana previa a los anuncios del Gobierno sobre medidas contra la inflación. Se trata de unos 1700 productos con subas promedio superiores al 7 por ciento.
Esa movida de subas no ancladas a mayores costos, tiene un particularidad: los que más aumentaron fueron las empresas que monopolizan las góndolas de todo el país. Según cifras de ventas en todo el sector -en comercios chicos, medianos y grandes- la mayor parte de las firmas con subas, son dueñas de 5 de cada 10 productos que se comercializan. Con ese peso presionan con garantías de ganar, dado que semejante concentración refleja que, sin ellos, el abastecimiento masivo, a volúmenes importantes, se cae.
En el caso de los aceites, contabilizado por unidades, hay tres empresas que concentran el 90 por ciento de la venta. Son Aceitera General Deheza (AGD), Molino Cañuelas y Molinos Río de la Plata, con tercios iguales. La última compañía, de la familia Pérez Companc, fue una de las señaladas por el secretario de Comercio, Roberto Feletti, en la última conferencia de prensa.
En el rubro Harinas, Cañuelas se lleva el 34 de la góndola, Molinos Río el 22 y Morixe el 18. Luego, con mucha menos participación, aparecen Lagomarsino, Molino Chacabuco y otras. Pero el grueso vuelve a estar en manos de los apuntados por especular con precios. Algo similar ocurre con un derivado, las pastas secas, donde Molinos Río tiene casi el 65 por ciento y, muy lejos, quedan Arcor con el 3 por ciento y Unilever con el 2 por ciento. El resto son productos importados y proveedores regionales.
Esas participaciones "accionarias" menores en góndola, en el caso de las pymes, son usadas por los comercios para compensar cuando hay alzas fuertes de los grandes. Los gigantes juegan, además, con la certeza de que son pocas las empresas que tienen músculo y clientes para producir de manera masiva. Además, como la Ley de Góndolas sólo garantiza la disponibilidad de productos variados, es decir, que haya proporciones similares, es un problema para las pymes: los grandes tienen mayor espalda comunicacional, ergo, terminan ganándoles a los productos que, aún estando en góndola, son menos conocidos.
Hay otros casos de productos que también muestran concentraciones elevadas. En el rubro Arróz, Molinos Río de la Plata tiene el 25 por ciento de las unidades vendidas y AdeccoAgro el 20, las dos fueron apuntadas como aumentando de manera preventiva. Y no sólo eso, si se ven las ventas por precios, son las dos empresas que venden más caro. El resto del negocio es molinería más pequeña.
El sector lácteos presenta, del total, un número que alarma: Mastellone, conocido por su marca Serenísima, tiene el 67 por ciento de las ventas en leche fluida, seguido por AdeccoAgro con el 13. Y si se hace foco en los postres producidos con leche, la francesa Danone tiene casi la mitad de las ventas, y la cooperativa Sancor un 37 por ciento. En Bebidas con Alcohol, en tanto, ocurre algo similar: en cervezas, también apuntadas por Feletti, ABBInveb, que tiene Quilmes y otras marcas, tiene el 72 por ciento del mercado seguido por la chilena CCU (Imperial), con un 22. Mientras que en Gaseosas Coca Cola tiene el 67 por ciento y Pepsico el 35.
El aderezo más vendido en la Argentina es la mayonesa, la produce AGD, que se lleva el 57 por ciento de las ventas totales. En caldos, en tanto, Univeler se queda con el 92 por ciento de la venta en unidades. Esta última empresa también reina en Desodorantes Corporales, con un casi 8 de cada 10 unidades vendidas. En pastas dentales, uno de los rubros más vendidos de Higiene y Cosmética, Colgate Palmolive vende el 81 por ciento de los comercializado, mientras que Procter and Gamble (P&G), tiene el 14.
Por el lado de la limpieza del hogar, impacta el negocio de las lavandinas: Clorox (Ayudín), tiene el 82 por ciento de las ventas en unidades. Mientras que Unilever vuelve a tener mucha injerencia en Detergentes, con el 61 por ciento.
En la mesa con el Gobierno
Feletti, junto al subsecretario de Políticas para el Mercado Interno, Antonio Mezmezián , se reunieron con direcctivos de la Coordinadora de Productores de Alimentos (Copal), la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) y muchas de las empresas que más aumentaron, para coordinar la vuelta atrás de los aumentos injustificados. "Hay productos con aumentos que no tienen ninguna justificación, y si bien podemos entender y nos comprometemos a revisar algunas excepciones, esa información tiene que estar sobre la mesa para ver cuál es la incidencia de diversos factores. Todas y todos tenemos que apostar al crecimiento del país y moderarnos. El objetivo de estas mesas es hablar sobre las problemáticas, llegar a un acuerdo y luego cumplirlo. Tenemos que ponernos de acuerdo en que se retrotraigan los aumentos inexplicables”, dijo Mezmezián.
Un rato antes, Feletti aclaró que a partir de esta mesa de trabajo se pueda llegar a un acuerdo en abastecimiento y precios, tras las alertas de incumplimento que se presentaron días atrás en el monitoreo diario que se realiza, donde se detectó que el abastecimiento del programa +Precios Cuidados pasó de un 80 por ciento a un 60 por ciento en AMBA y que los precios registraron subas de hasta 2,4 por ciento en un solo día en todo el país, en muy diversos rubros.
“Nadie quiere que comercializadoras y productoras pierdan plata, pero tampoco queremos una escalada de precios que nada tiene que ver con la situación macroeconómica del país y que no había pasado en los casi 6 meses que llevo de gestión”, concluyó el secretario.